Te compartimos ejemplos de estados de la cuestión

Muchas veces, la mejor manera de comprender es ver lo que otros han hecho. Por eso, en este artículo te compartiremos ejemplos de estados de la cuestión de una tesis. Además, te explicaremos cómo confeccionar el tuyo. Continúa leyendo para enterarte de todo.

👉 También te puede interesar la lectura de qué es y cómo se realiza el estado de la cuestión de una investigación.

Ejemplos de estado de la cuestión de una tesis

Como lo prometimos, lo primero que haremos será compartir contigo la información que has venido a buscar. Aquí tienes:

Ejemplo de estado de la cuestión I.

Ejemplo de estado de la cuestión II.

Muy bien, hecho esto, lo siguiente será explicarte qué es y cómo elaborar este apartado en tu propio proyecto.

Ya visto el ejemplo: ¿Qué es el estado de la cuestión?

Como verás en los ejemplos de los estados de la cuestión que compartimos, se trata de información relevante referida al tema de investigación. En esencia, es una especie de perspectiva panorámica vinculada a un área determinada.

Aquí se incluyen los autores referentes de la temática abordada, las teorías principales, las preguntas, metodologías e instrumentos de investigación más efectivos, entre otras cosas. A su vez, el estado de la cuestión debe demostrar si las ideas revisadas se ajustan a la tesis de tu proyecto, proceso que involucra a la búsqueda bibliográfica.

Pero no se debe redactar como una enumeración descriptiva de teorías, sino, como un texto guiado por un hilo conductor. Es decir, que debes desarrollar el estado de la cuestión con cierta narrativa, en donde quede explícita la importancia que tiene para tu trabajo.

En este sentido, podemos enumerar las características que presenta este apartado.

Características del estado de la cuestión

A grandes rasgos, el estado de la cuestión debe:

• Proporcionar una síntesis de resultados, que expresen qué sabemos y qué no, en relación con el tema abordado.
• Delimitar el problema y exponer nuevas líneas de investigación, diferenciando lo que se ha hecho de lo que queda por hacer.
• Actuar como nexo con la pregunta de investigación, y al mismo tiempo, identificar variables relevantes para tu trabajo.
• Evitar aproximaciones que no contribuyan a alcanzar los objetivos de tu estudio.
• Identificar áreas que son fuente de controversia, ya que te permitirá encontrar puntos de análisis interesantes.
• Formular preguntas que requieran de una investigación para ser respondidas.
• Proporcionar evidencia que sirva para explicar los hallazgos encontrados por tu propio estudio.
• Identificar relaciones entre ideas teóricas y aplicaciones prácticas previamente planteadas.

Como podrás ver, el estado de la cuestión de una tesis es un ejemplo claro del desarrollo que deberá seguir tu trabajo. Una buena elaboración de este apartado te facilitará mucho el camino para llevar adelante tu investigación. 

A continuación, te explicaremos cómo confeccionarlo paso a paso. 

Pasos para redactar el estado de la cuestión

Presta mucha atención para sacarle el máximo provecho al estado de la cuestión de tu proyecto. Comencemos con los pasos.

Inicia la búsqueda de bibliografía

El objetivo de esta primera etapa es confeccionar una lista bibliográfica que te ayudará a comenzar la investigación. Aquí deberás rastrear libros, artículos, tesis, presentaciones en conferencias, informes oficiales, entre otros.

Para saber si abordan la temática que te interesa, lee los abstracts. Podrás usar buscadores de distintos tipos como Google Académico o Dialnet, o bien, bases de datos de universidades. También allí podrás encontrar más ejemplos de estados de la cuestión si los necesitas.

Procura ocupar un gestor de referencias al hacer este trabajo, así podrás llevar un registro de las fuentes consultadas. Además, ten en cuenta que esta lista es una primera aproximación, ya que muchos de los títulos encontrados serán descartados posteriormente.

También puede ocurrir que esa bibliografía te ayude a identificar nuevos títulos que se adapten mejor a lo que deseas investigar.

Analiza la bibliografía encontrada

Lo primero será descartar lo que no sirva. Para ello, haz una lectura rápida del material encontrado. En este proceso encontrarás los textos necesarios para empezar a construir tu proyecto. 

Repetimos el consejo que te dimos en el punto anterior, toma nota de todo lo que leas. Es altamente probable que más adelante quieras recuperar algún artículo que has descartado. Aunque no lo utilices, registra qué contiene y cómo recuperarlo.

Analiza las líneas de investigación

Tal y como mencionamos anteriormente, aquí será necesario identificar los conceptos importantes, los autores referentes, y las líneas de investigación existentes. Asimismo, será prudente desglosar el tema en secciones, y ordenar la información de acuerdo a líneas temáticas. 

Esto te permitirá estructurar tu estado de la cuestión de manera que su lectura sea fácil. Realiza este trabajo teniendo en cuenta cómo los distintos autores estudiados analizan los temas que investigas. Incluye las corrientes o perspectivas teóricas y metodológicas que ocupan, y anímate a incluir también tu aporte personal a la temática.

Redacción del estado de la cuestión

Has llegado al último paso del proceso, y aquí deben quedar demostradas varias cosas. Lo primero será tu dominio de la materia, que incluye la correcta incorporación de autores, conceptos, líneas de investigación y vacíos temáticos.

Por otro lado, deberás plasmar, de manera crítica y analítica (nada de copiar y pegar) el estado del conocimiento sobre el tema elegido. Y todo esto debe ser presentado de acuerdo a los criterios de estilo propuestos por tu universidad, es decir, forma, redacción y referencias.

Si lo has hecho bien, tu estado de la cuestión reflejará de manera directa, sencilla y explícita la información recabada. Recuerda que la construcción del conocimiento solo es posible si retomamos las ideas de quienes pensaron antes que nosotros.

Conclusión sobre el estado de la cuestión y sus ejemplos

En este artículo nos propusimos compartir contigo ejemplos del estado de la cuestión con el fin de ayudarte a elaborarlo. Luego, desarrollamos qué es este apartado, y cuáles son sus características. Por último, vimos cada uno de los pasos para confeccionarlo, comenzando por la búsqueda, pasando por el análisis, hasta llegar a su redacción. 

Esperamos que la información te haya resultado útil y que te permita avanzar con tu proyecto de investigación. Antes de terminar, debes saber que, si necesitas ayuda para llevar adelante tu trabajo, puedes contar con nosotros. A continuación, te contaremos qué tenemos para ofrecerte.

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En Tesis y Másters sabemos que elaborar el estado de la cuestión, o el proyecto académico completo, representa una tarea de gran dificultad. Para ayudarte en este proceso, contamos con una serie de servicios profesionales.

Así, podemos acompañarte brindándote asesorías personalizadas, donde podrás evacuar todas tus dudas. Asimismo, si has finalizado tu trabajo, puedes enviárnoslo para que nuestros expertos lo corrijan. Incluso, revisaremos el nivel de plagio empleando la tecnología de Turnitin.

Pero, sabemos que, en ocasiones, estas prestaciones no son suficientes para resolver todos los problemas, por eso, tenemos una solución integral: redactamos tu proyecto por ti. Por supuesto, hacemos esto de manera confidencial, y te garantizamos un trabajo de la máxima calidad académica. Si quieres saber más, te sugerimos que continúes leyendo.

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